jueves, 26 de marzo de 2009

Cuando la Tentación es Grande


La relación de los médicos con los medios de comunicación es dual. Si trabajas en un hospital público huyes de ellos pues te van a machacar con preguntas impertinentes y van a resaltar el desorden y suciedad de los ambientes hospitalarios. Además de siempre reverberar una queja, así sea verdadera o falsa.


En cambio, en el sector privado algunos médicos se comporta como veletas, soñando con la invitación a una estación de radio o a un set de televisión, a que hablen de lo que sabe, le harán un millar de consultas, las que resolverá con solvencia. El premio final es la promoción profesional y la consabida frase: ¿a qué número lo pueden llamar doctor?


Pocos tienen la posibilidad de formar parte del staff de un medio de comunicación. Allí aparte del prestigio ganado por la exposición a miles de personas, se adquiere una responsabilidad, la de decir las cosas correctas.


No sólo es la credibilidad implícita que conlleva la de ser un médico en un medio masivo de comunicación sino además la comunicar conceptos técnicos en un lenguaje claro y entendible para el público. Un valor adicional exigido es que los pares, en este caso el resto de médicos, acepte la veracidad de lo que se dice.


Un caso peculiar es el programa 7 Vidas que se emite por el canal 6 de Cable Mágico, Plus TV, así dice la presentación del programa en la página web del canal:



Dos de las cosas que más preocupan hoy al ser humano son la salud y el bienestar. Por eso, 7 Vidas ha sido recibido por el público no sólo con entusiasmo, sino con gratitud. Y es que no se trata de dar recetas, o vender un servicio médico o una línea de medicinas naturales, sino de informar a la gente en temas de salud para sentirse bien y mejorar su calidad de vida. Con múltiples consejos, que van desde la alimentación hasta sanos ejercicios, Mercedes Cardoso y el Dr. José Francisco Recoba nos brindan claves para vivir mejor, además de las interesantes notas a cargo de Lara Vicich y Milagros Cabanillas.

El programa tiene un contenido temático y para desarrollarlo invitan a médicos con experiencia e el tema. Dos cosas me sorprendieron, la naturalidad y seriedad de Mercedes Cardoso para manejar el programa, lo hace con soltura, con preguntas adecuadas, tato que podría hacer las entrevistas sola.

El otro, el Dr. Recoba, algunas de sus alocuciones no distan mucho del lugar común, aunque eso en sí mismo o sea un gran problema, sino que sus intervenciones no le dan un valor agregado al programa, salvo la de tener un médico en el set. En algunos programas ha intentado hacer algo propio de un médico, que es resumir las conclusiones de trabajos de investigación publicados en revistas médicas, pero algo que está bien en medios académicos no lo está para un programa de televisión, máxime si no existe la cultura de información que si ocurre por ejemplo en los Estados Unidos, donde algunos hallazgos de investigación son primera plana en prensa escrita o televisión.

A pesar que el canal está dirigido al sector AB, las conclusiones o intervenciones de Recoba, no dejan de estar algo alejadas de la realidad local. No se nota en sus afirmaciones un trabajo de campo que nos diga que conoce el entorno sanitario peruano, resumir los journals no es suficiente, le falta el sabor local. Debería recordar eso de Think Globally, Act Locally.

Aparte tenemos el problema de las Incongruencias, que hablamos en un post anterior, Recoba usa tallas XXL y va en aumento. ¿Cómo hablar de buena salud, dislipidemia o riesgo cardiovascular si el índice de masa corporal y el cociente cintura-cadera de uno de los conductores es mayor que el recomendado clínicamente?

Pero como de la exposición televisiva al figuretismo hay un sólo paso, y corto además, Recoba acaba de cometer el peor de sus errores. Ya se veía venir, su vedetismo lo llevaría a los comerciales de televisión a endosar su colegiatura a un producto comercial.

Desde hace una semana aparece un comercial sobre Leche Evaporada Laive Sin Lactosa. El comercial en mención muestra a una madre machacando a su hijo para que tome la leche, ante la insistencia el niño se queja que la leche le cae mal. ¿La solución? la da el Dr. Recoba, indirectamente dice que el niño es intolerante a la Lactosa, al referir que en el Perú existen muchos intolerantes a lactosa. Ergo, debe tomar la nueva leche Laive.

La intolerancia a la Lactosa es una condición que existe pero no es común, es además un problema sobre todo de adultos. En niños puede ocurrir en bebés prematuros o en niños más grandes a causa de un episodio diarreico agudo. Pero ni los niños prematuros deben tomar leche evaporada ni la prescripción de fórmulas de lactosa debe hacerlas un lego. Más aún, que yo sepa no se tienen cifras ni siquiera aproximadas de la magnitud del problema en el país.

Recoba ha incurrido no sólo en un error de concepto, sino que su presencia y sus afirmaciones llevan a conclusiones inapropiadas e inexactas que benefician a un tercero, es decir está induciendo falsamente a la compra de leche con fines de lucro. Mas aun, esta creando o mejor dicho agrandado artificialmente la magnitud de una enfermedad. Las implicancias del accionar de Recoba en el comercial alcanzan incluso la ética del ejercicio profesional al dar información sesgada. No debió prestarse a eso. Me recuerda mucho al comercial de hace varios años donde la Sociedad Peruana de Pediatría recomendaba las cajas Tetrapack (que incluso contienen vino o sangría) y no el consumo de leche o la de Dermatología recomendaba sólo Pampers.

No está nada mal vender leche (es más yo tomo leche evaporada Laive todos los días) ni aparecer en un comercial, sino el de vender su imagen sin percatarse en los fines que serán usados (es decir sin leer el script). Ahora muchos niños y niñas, en un entorno donde a muchos de ellos no les gusta la leche y las madres tienen que hacer malabares para disfrazar el sabor, tendrán como pretexto al médico gordito de la tele para decir que les cae mal y no tomarla o exigir que compren una leche más cara.

En un medio donde la televisión llega a todos los estratos sociales, y el consumo de calorías y proteínas en niños en promedio es deficiente, inducir a la compra de productos más caros con información incompleta y sesgada es altamente cuestionable.

Recoba, puede apelar que lo sorprendieron, mas grave sería haber hecho el comercial a sabiendas que la información inducía a una conclusión interesada. Haría bien en utilizar la tribuna que ya posee en la televisión por cable para aclarar el punto, aunque dudo que lo haga.

Problemas como éste distorsionan y enturbian las relaciones fluidas y continuas que deben de existir entre los médicos, los medios de comunicación y las compañías que producen fármacos, alimentos o suplementos nutricionales.

Esperamos además que las autoridades (¿?) del Colegio Médico y el Ministerio de Salud digan su palabra.

¿Lo harán? Creo que no.